Consejos poco conocidos para cambiar bujías
Las bujías son un elemento imprescindible para el correcto funcionamiento de cualquier coche con motor de gasolina. Son tan antiguas como el automóvil en sí, y sin ellas no se podría producir la explosión de la mezcla de gasolina y aire en el interior de las cámaras de combustión. La chispa de las bujías es un simple arco voltaico entre dos electrodos, producido por el paso de corriente eléctrica a través de ellos. Son absurdamente sencillas y fiables, pero son componentes sometidos a un uso y desgaste constante, y deben ser reemplazadas.
Dependiendo del tipo de motor, deben sustituirse cada 60.000 kilómetros (en autos a gasolina) o cada 120.000 (si son diésel).
Podés cambiar las bujías vos mismo y te dejamos unos consejitos poco conocidos para hacerlo más fácilmente.
1 Sacar las bujías con ayuda de herramientas químicas
Si es difícil cambiar una bujía, algunos líquidos pueden ayudar a romper la corrosión y el carbono entre las roscas del tapón y la cabeza.Se puede verter un líquido en los orificios y dejar reposar durante una hora o más, la clave con este método es el tiempo, ya que cuanto más tiempo esté el fluido actuando, mejor será la penetración.
Si hay dificultad para extraer la bujía, este método con aditivos puede evitar daños en las roscas.
Rompé los tapones un cuarto de vuelta y agregá un limpiador de inyector de combustible o penetrante.
Si se usa mucho líquido, es posible que se deba cambiar el aceite después de reemplazar los tapones.
2 Limpieza en el orificio de la bujía
La bujía y el tubo de la bujía deben de estar libres de aceite, agua y residuos.
La extracción de la bujía puede ser difícil si hay algo en el orificio.
Si se ve aceite u otros residuos en el tubo de la bujía o en el orificio, se debe reemplazar la junta de la tapa de la válvula o la funda de la bobina para evitar un fallo de encendido en el futuro.
3 Eliminación de la temperatura del motor
Un tema controvertido entre los técnicos e ingenieros es si el motor debe estar caliente o frío al reemplazar las bujías.
Los fabricantes de equipos originales y los fabricantes de bujías siempre recomiendan quitar e instalar las bujías cuando el motor está frío.
El razonamiento es que esto ocurre cuando la bujía y el cabezal tienen la menor cantidad de expansión térmica y disminuye las posibilidades de dañar las roscas.
Esto es crítico cuando se considera que la cabeza podría ser de aluminio y el tapón es de acero.
Los creyentes en el «método de eliminación cuando se usa en caliente» no pueden explicar por qué funciona, aunque algunos dicen que afloja el desgaste y la corrosión entre las roscas del tapón y la cabeza.
4 Pernos de la bobina
Siempre se debe aplicar un ajuste de torsión especificado al perno pasante de montaje para la bobina.
Los pernos flojos podrían provocar fallas en la vibración.
Si se aprietan demasiado los pernos, se podría producir un fallo prematuro de los pernos. No hacerlo bien puede llevar a una pesadilla de diagnóstico.
5 Bajo o sobre torque
La mayoría de los artículos dirán que use una llave dinamométrica, esto implica la transferencia de calor.
Una bujía de baja torsión no hará contacto completo con la culata. Esto reduce la capacidad de un tapón para transferir calor y dará como resultado temperaturas elevadas en la cámara de combustión.
Esto puede causar pre-ignición y detonación y causar daños al motor.
Una bujía con una torsión excesiva puede causar tensión en la carcasa metálica, lo que puede provocar daños o roturas en la rosca. Además, el ajuste excesivo puede comprometer el sello interno o incluso causar una fractura en la línea del aislador.
A la hora de reemplazar tus bujías, asegurate de usar recambios originales y en buen estado, ya sean de desarmaderos o nuevos. Además es de vital importancia prestar atención al tipo de bujía y distancia entre electrodos que nos indique el manual para que no afecte a las prestaciones ni al consumo de nuestro vehículo.
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